martes, 15 de octubre de 2013

Alocados años 20

Los felices y locos años 20

Los años 20 fueron años de crecimiento y profundo cambio social, político y cultural.
El crack del 29 dio al traste con la loca época de los libertadores años 20.

La situación histórica de estés años, con la derrota de Alemania y el boom del crecimiento en Norteamérica, resultante de la 2ª Revolución industrial, influye en el  movimiento en Europa occidental, el dinamismo social es perceptible en las costumbres, la cultura y en el crecimiento económico.

Pero no todo fueron alegrías. Después de este “boom” y el cambio a antiguos estereotipos, el entramado que se creo en la posguerra comenzó a rescrebajarse en 1928, cuando los inversores norteamericanos, atraídos por la burbuja financiera que se expandía como la pólvora por Nueva York, dejaran de invertir en el exterior.

La mayor crisis económica  conocida por el capitalismo empezó a contagiarse hasta llegar al mundialmente conocido crack del 29 y los difíciles años 30.


Las flappers. Mujeres liberadas, antecesoras de nuestra realidad actual.

Desde el año 1910, el abandono del corsé como se conocía hasta el momento  fue progresiva hasta llegar a su total liberación después de la 1ª guerra mundial cuando el cambio fue radical. A pesar de lo que muchos piensan se utilizaba pero para reprimir formas, caderas y pechos y dar así una sensación de imberbe, de una juventud poco identificada y temprana.


La influencia del jazz, las revistas de moda y las que mas tarde fueron grandes iconos del diseño como Vionnet o Coco Chanel, ejercieron su incisiva influencia en la mujer de la época, marcando una tendencia para el futuro.

La ropa cambio tremendamente, se volvió colorista y combinable entre tejidos y formas, había que olvidarse de la tremenda época de la guerra.

Comienza una revolución donde la imagen de juventud triunfa hasta sus últimas consecuencias.
Nadie quiere aparentar su edad, la juventud eterna es el único fin.


Se acortan las faldas, se bajan los talles, lentejuelas, brillos, y toda excentricidad habida o conocida esta permitida.
Surgen las mezclas de estilos, mujeres liberadas en formas y portando estilismo masculinizado con cortes de pelo a lo garçon, teñidos de rubio platino o negro azabache...con largos flequillos que bajan hasta las cejas o mucho mas cortos engominados para dar un porte masculino y ser mucho mas prácticos para la utilización de sombreros ceñidos.




El mundo masculino, el territorio del hombre ya no es de uso exclusivo, pantalones, cigarros y pelo garçon triunfan y las mujeres se liberan de la opresión de lo que no quieren y lo que  estipuladamente correcto les fue adjudicado según lo que otros consideraron necesario e indiscutible.



A partir de 1925, los vestidos se acortan, los abrigos son majestuosos, los zapatos se limitan a sujetar el pie para bailar, flecos, plumas, transparencias… el glamour y la sugerencia hacen acto de presencia.

Los sobreros ajustados, las cintas ceñidas a la cabeza, pelo corto y cejas depiladas a la mínima expresión para resaltar los ojos, son señas de identidad de la época.
Los rostros se maquillan con polvos de talco para resaltar su blancura, los labios se pinta con rojos ardientes y grandes ojos enmarcados por lápiz negro.
Coco Chanel cambio la tendencia en cuanto al rostro, el sol y el moreno empiezan a ser sinónimo de riqueza, ocio, playa y sol.
Las mujeres abandonan la palidez del rostro, sinónimo de fábricas y encierro, despachos sin sol y pocos días vacacionales.
 
“Los platinos años 20”, fueron el comienzo de la mujer moderna, su liberación y su decisión.


El terreno de lo masculino se queda pequeño, mujeres al volante de flamantes coches, los cigarrillos, el licor, la reuniones de sociedad, el estilo “Bob cut” suplen sin piedad a las habituales y hogareñas mujeres que silenciosamente habitaban las casas esperando que algo extraordinario sucediese.
Supongo que alguna dijo por primera vez…¡ Es la hora, llego el momento y por que no…! sin que por ello sufriese las graves consecuencias de decidir.



Aunque esta época dorada marco un antes y un después, la realidad es que la Gran Depresión de los años 30 devolvieron a la mas cruenta realidad a la mujer y aun lugar poco deseable para muchas y muy confuso para otras. De igual modo “el que tuvo retuvo” y algo queda de esa liberación, según se mire, en el mejor sentido de la expresión.


































Fuentes: Felix Maocho, La esfera. Anuncio de un coche de la época, Rafael Dobado Gonzalez, Historia de la moda y los tejidos, Vogue, Cartelera, imagenes de cine.

2 comentarios:

  1. gracias por su información, me sirvió para un trabajo de la escuela

    Good Job

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    1. De nada Rafael.Te invito a seguir el blog siempre que quieras.

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